Landaluce se ha remitido a las noticias publicadas a finales del mes de marzo de 2007, cuando el propio Rafael España aparecía junto a la entonces consejera de Justicia, María José López, asegurando que los trabajos de construcción de la Ciudad de la Justicia arrancarían en 2008. Esto ocurría, y no puede ser casualidad, apenas dos meses antes de la celebraciones de elecciones municipales. Un año antes, en marzo de 2006, los mismos actores salían a escena para anunciar a bombo y platillo la inversión y el esfuerzo que la Junta iba a hacer para conseguir aglutinar todas las sedes judiciales en un único edificio, con lo que se conseguiría mejorar considerablemente la administración de Justicia en Algeciras y su ámbito territorial en esta materia.
Cinco años después de ese primer anuncio, prosigue Landaluce, hoy volvemos a encontrarnos con Rafael España compareciendo, junto al actual consejero de Gobernación y Justicia, Luis Pizarro, para anunciar que la Ciudad de la Justicia tiene “vía libre”. Y lo que es peor, Pizarro y España hacen este anuncio, institucional a todas luces, en la sede del PSOE algecireño. Es decir, utilizando una cuestión que debería enmarcarse en el ámbito de las instituciones en la sede de un partido político a pocas fechas de la celebración de elecciones y con las mismas promesas que hace cuatro años.
Descubrir los intentos de engañar a la ciudadanía no es buscar la confrontación política, tal y como aseguró Pizarro en su comparecencia ante los medios de comunicación refiriéndose al Partido Popular, asegura Landaluce.
Cuando menos, España y Pizarro deberían haber dado explicaciones por los retrasos acumulados en este proyecto, como también deberían haber explicado el baile de cifras de la que esta actuación está siendo objeto. De los 23 millones de euros que se anunciaban en un primer momento, allá por el año 2006, el PSOE viene ahora a decir que hay 9 millones “garantizados”. El candidato popular se pregunta dónde están los 14 millones que faltan en esas cuentas, porque, lo que es en los presupuestos autonómicos, no están.
Mucho nos tememos, concluye Landaluce, que desde ahora y durante toda la campaña previa a las elecciones municipales, vamos a volver a ver cómo salen a relucir proyectos de la mano del Partido Socialista para los que han tenido cuatro años para llevarlos a cabo y de los que no han hecho nada, pero que van a utilizar de manera partidista.
