Bonnie y Jamie ya habían sido vistos en alguna que otra ocasión intercambiando muestras de cariño, pero ellos siempre habían negado los rumores sobre su supuesto romance argumentando que sólo eran amigos y compañeros de profesión.
Pero parece que han decidido dejar de esconderse, y así han confirmado a la prensa su relación: "Sí, estamos saliendo", ha admitido Bonnie, "llevamos juntos unos meses y nos va bien; este domingo iremos juntos a la entrega de los premios BAFTA".
Bonnie es conocida por su papel en la saga del joven mago, donde encarna a la novia de Harry, Ginny Weasley. Por su parte, Jamie ha participado en Luna Nueva interpretando al vampiro Caius y ahora se ha unido también al elenco de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte donde interpretará al villano Grindelwald.
Esa película, en la que tanto Bonnie como Jamie actuarán, será la última sobre las aventuras de Potter; y la actriz ya ha mostrado sus temores acerca de cómo le afectará el fin de la saga.
"Normalmente pasan tres o cuatro meses entre rodaje y rodaje, así que lo empezará a notar cuando ya hayan pasado seis meses", ha admitido a la revista OK!. "Pero estoy estudiando cine, así que espero mantenerme ocupada y seguir actuando a la vez que estudio".