La muestra Bogart: el mito incluye un batín personal del actor con sus iniciales grabadas, una pitillera, una pipa y el anillo de plata que le regaló el director de Casablanca, Michael Curtiz, así como unos pasadores de pelo personales de Bacall y fotos firmadas de la actriz.
Asimismo, una representación del Halcón Maltés presente en la película del mismo nombre, la lamparita de mesa del Rick’s Cafe que aparece en Casablanca y el primer contrato de Bogart con la Warner Bros para Bosque petrificado pueden verse igualmente en la sala de exposiciones Zaida de la Caja Rural, que acoge la muestra.
El anillo personal de su esposa, el reloj de bolsillo que ésta le regaló con una dedicatoria y un dibujo que la madre de Bogart hizo de su hijo cuando aún era un bebé también se encuentran entre las piezas que reúne la muestra, procedentes de la Fundación Bogart y de varios coleccionistas particulares.
A estos objetos personales se añade la aportación del Festival de Cine Fantástico de Sitges (Barcelona), que ha colaborado con una colección de dibujos y viñetas inspirados en Casablanca y realizados por diecinueve artistas, como Forges o Francesc Rovira entre otros, bajo el título común de Tócala otra vez, Sam.
El hijo de Audrey Hepburn –que fue la protagonista de la primera edición del festival–, Sean Ferrer, asistió a la presentación y ha invitado al público a redescubrir “no sólo a un gran actor, sino también las razones por las que ciertas películas y ciertos personajes como Humphrey Bogart se mezclan en la memoria con lo más mágico del cine de la época”.
“Creo que junto a mi madre, Bogart es, entre las estrellas de esta maravillosa época dorada de Hollywood, el personaje que más significa y más nos acerca a ese tiempo de sueños tan especial”, ha declarado.
